En un mercado en el que cada día se crean más productos, nacen pequeñas y medianas empresas, y surgen negocios digitales de forma vertiginosa, la publicidad destina miles de millones de dólares al año para llegar a cada rincón y captar la mayor cantidad de clientes. En medio de esta competencia voraz, el marketing de guerrilla se ha convertido en una opción muy atractiva para aquellas compañías que no tienen el músculo financiero para realizar una campaña de mercadeo robusta y con un alto presupuesto.
Si este es tu caso y estás interesado en desarrollar una estrategia de mercadeo efectiva y con bajo presupuesto, ¡aquí te contamos de qué se trata el marketing de guerrilla y algunas técnicas que podrías aplicar en tu negocio!
¿Cómo está el mercado?
Hace un tiempo, la balanza de las estrategias de marketing estaba inclinada hacia quienes tenían grandes presupuestos para gastar en publicidad. Sin embargo, hoy en día la tecnología otorga a los pequeños empresarios una ventaja que les permite producir materiales de marketing de primera clase que antes requerían de muchos recursos monetarios y ahora sólo necesitan de una gran imaginación.
La tecnología ha llegado para cambiar y nivelar el campo de juego, dándole la posibilidad a las pymes de aparecer en el radar de los mercados con ofertas de productos que pueden, incluso, superar a grandes compañías.
Marketing de guerrilla
Pero, ¿qué es el marketing de guerrilla y de dónde surgió? En internet se pueden encontrar diversas explicaciones. In Bound Cycle lo describe como “estrategia publicitaria que utiliza técnicas poco convencionales y que requieren una inversión mínima para conseguir la máxima difusión mediática a través de ellas”.
El sitio Bien Pensado va un poco más allá y le llama una “técnica no convencional de marketing que se apoya principalmente en la creatividad y en entornos urbanos cotidianos, para llegar a audiencias específicas y atraer su atención de forma distinta y sin las necesidad de invertir gran cantidad de recursos”.
Con el marketing de guerrilla se logra salir del molde en el que se encierra el formato tradicional, y que es generalmente usado por las empresas para comunicarse, para “valerse más de la recursividad y el sentido de la oportunidad”, de esta forma “impactar y llamar la atención de la gente en una forma sorprendente, inesperada y que causa novedad”.
La clave está en que las técnicas que se usan en el marketing de guerrilla son tan poco convencionales que los consumidores no se dan cuenta de que están recibiendo publicidad. Es arriesgarse a hacer cosas que otros no hacen.
Cuando se realiza una campaña, basada en este tipo de marketing, debe innovar y ser recursiva de tal forma que no se haya hecho antes para causar un máximo impacto en el público. El efecto que se busca es generar voz a voz, que sea compartida y que derive en una publicidad gratuita.
Técnicas para el marketing de guerrilla
In Bound Cycle asegura que existen muchas técnicas para impactar a la audiencia, pero se centra en cuatro. Cabe aclarar que el uso de estas técnicas no es sencillo ni garantiza el éxito de la campaña, sin embargo el bajo costo de este tipo de estrategias permite usarlas de manera constante hasta lograr que una posicione tu marca, producto o servicio.
- Ambient marketing: o marketing estático en la calle, son acciones creativas que se realizan mediante la transformación de elementos urbanos preexistentes, para llamar la atención de los peatones. Se puede confundir con el Street Marketing, pero la diferencia está en que, en el Ambient las acciones son estáticas, mientras que en el segundo se debe interactuar con las personas.
- Flashmob: si bien no es estrictamente una técnica publicitaria, consiste en una ‘reunión espontánea’ de personas que realizan una coreografía o acciones conjuntas y sincronizadas en espacios. Esto genera sorpresa a la audiencia por la sensación espontaneidad que produce. Además, son llamativos porque están fuera de un contexto ‘normal’ de comportamiento.
- Publicidad encubierta: esta es una modalidad del concepto publicitario caracterizada principalmente por la ubicación de ‘mensajes’ de un producto o marca dentro de un espacio distinto y sin previo aviso al espectador. Esta técnica es muy usada en películas pero se ha pasado cada vez más al mundo digital. Lo podemos ver en youtubers o instagramers que realizan videos en los que hablan sobre determinadas marcas, productos o empresas, mientras realizan acciones cotidianas o graciosas.
- Vídeos virales: el sueño de todas las marcas es crear un video que se extienda por todas las redes como una especie de virus, imparable. Cuando se consigue que este tipo de piezas llamen tanto la atención, la marca o el producto puede ser visualizado millones de veces. Sin embargo, no es sencillo lograr que una creación audiovisual sea compartida por miles de personas en poco tiempo, es por eso que se vuelve importante aprovechar la oportunidad y el momento de hacerlo. Aunque esta modalidad ha evolucionado y no necesariamente deben ser videos, también hay mensajes o imágenes virales que pueden producir el mismo impacto.
El creador del término
El término marketing de guerrilla comenzó a utilizarse a mediados de los años 80 cuando fue acuñado por Jay Conrad Levinson en el libro best-seller ‘Marketing de Guerrilla’, uno de los más vendidos sobre este tema. Levinson era sicólogo y especialista en marketing, fue director creativo en Leo Burnett y vicepresidente senior de otra agencia publicitaria, JWT.
En su libro, Levinson explica inicialmente que marketing es “todo lo que usted hace para promocionar su empresa, desde el momento que lo concibe hasta el punto donde los clientes regularmente compran su producto o servicio y comienzan a patrocinar su negocio”.
En ese sentido, el marketing es todo lo que abarca un negocio, desde el nombre, pasando por el método de manufactura o servicio, los colores, las tallas y formas del producto, la ubicación de la empresa, hasta el entrenamiento de ventas, la presentación de ventas y la resolución de problemas.
De acuerdo con el portal especializado Entrepreneur, debido a que la publicidad tradicional estaba perdiendo impacto en los medios masivos de comunicación, esto conllevó a que Levinson y otros expertos comenzaran a reclamar la necesidad de implementar nuevas estrategias y enfoques de publicidad. Esto con la finalidad de volver a capturar la atención del público.
De esta forma nació el principio de usar tácticas no convencionales y que las campañas fueran impactantes, únicas e inteligentes, que dieran de qué hablar a las audiencias. El término hace referencia al modo de combate en el que la confrontación no es directa, sino que busca desestabilizar al oponente con pequeñas acciones, con capacidad de crear un gran impacto y que sean sorpresivas.
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