La estrategia comercial de una empresa es un documento crítico que define la visión, los objetivos, los valores y el modelo comercial de una empresa, entre otras cosas, y comunicarlo internamente de manera efectiva es esencial. Pero la comunicación externa también es fundamental, ya que puede alentar el apoyo de los inversores, obtener el interés del cliente y proporcionar una ventaja competitiva. Después de todo, en el entorno actual, las empresas suelen ser juzgadas por su percepción externa.
Los profesionales de comunicaciones tienen la tarea de comunicar adecuadamente la estrategia de negocio a audiencias externas.
Las comunicaciones, por lo tanto, son más importantes que nunca para las empresas y esto es especialmente cierto debido a la sobreabundancia de datos que la tecnología moderna ofrece a todas las personas, desde los inversores preocupados hasta el comprador atento.
Cuando no se establece una comunicación externa con propósito, los individuos terminan sacando sus propias conclusiones sobre la compañía, lo que en última instancia puede ser perjudicial para la imagen corporativa.
Comunicación externa e información estratégica
Los profesionales de la comunicación externa son responsables de condensar información estratégica importante en puntos clave y compartirlos de manera eficiente a través de los perfiles públicos de la empresa.
Se trata de una tarea cada vez más complicada, sobre todo si se tiene en cuenta cómo las nuevas herramientas de comunicación, como las redes sociales, han cambiado la forma de plantear el intercambio de mensajes, o cómo la estrategia de negocio puede influir en las acciones de los clientes en un entorno donde los valores personales a menudo impulsan las decisiones de compra.
La comunicación externa resulta clave en la gestión de reputación y, por eso, debe tenerse muy claro cómo compartir la información estratégica a las partes interesadas. Para ello hay que observar algunos puntos clave.
Las claves de una buena comunicación externa
Para no fallar ni dañar la imagen de la empresa, la comunicación externa ha de plantearse cuidadosamente, teniendo en cuenta:
- Modelos actualizados de comunicaciones. En décadas pasadas, los departamentos de comunicaciones existían con el propósito principal de crear contenido bien escrito para comunicados de prensa, discursos ejecutivos y publicaciones importantes. Sin embargo, en el entorno digital actual, se espera que las compañías mantengan una comunicación constante con audiencias externas. El comunicado de prensa ocasional ha sido reemplazado por publicaciones diarias en blogs y redes sociales. Para seguir siendo competitivas, las empresas deben proporcionar un flujo constante de contenido nuevo que, además, debe estar alineado en múltiples plataformas.
- Solidez estratégica. Comunicar la estrategia comercial a las partes interesadas y a los clientes es crucial, ya que los compradores toman cada vez más decisiones basadas en la reputación de una empresa. Una estrategia corporativa subyacente que define lo que es realmente importante para la empresa puede desempeñar un papel clave en la generación de ventas o en la obtención de apoyo de los inversores. Para que la estrategia sea efectiva, debe alinear las actividades con los objetivos tanto dentro de la empresa como entre los clientes. Conseguirlo depende de la comunicación externa y, por eso, sus responsables tendrán que implementar un proceso estructurado para la gestión de la marca y la reputación las 24 horas del día, los 7 días de la semana, para todos los interesados, en todos los canales y en todos los mercados. Cuando una estrategia comercial se comunica de manera efectiva y se comparte de manera eficiente a través de múltiples plataformas, esta información se vuelve fácilmente accesible para los consumidores que buscan negocios que se alineen con sus valores. Es la forma de lograr que la comunicación externa impulse las ventas de manera significativa y fomente conexiones profundas con los clientes.
- Gestión de la reputación. Administrar la imagen de marca de forma efectiva a menudo significa monitorizar, contribuir y responder a las interacciones en las redes sociales. La gestión proactiva y transparente de la reputación requiere de responder adecuadamente a los comentarios de los clientes y difundir información positiva que respalde la imagen del negocio, algo que, al mismo tiempo debe relacionarse con la estrategia general de la firma. La estrategia de negocio de una empresa define lo que es importante para la organización en términos claros y concisos. Esto, a su vez, determina la forma de gestionar la comunicación externa.
Teniendo en cuenta estas claves, podría decirse que, en general, los profesionales de la comunicación deben seguir estas pautas para comunicar de manera efectiva una estrategia de negocio externamente:
- Promover la estrategia de negocio como parte clave de la estrategia general de marketing de la empresa.
- Desarrollar gráficos promocionales que resalten los principios básicos de la estrategia de la compañía.
- Compartir actualizaciones de la estrategia de negocio a través de comunicados de prensa y publicaciones de blog.
- Promover actualizaciones de estrategia en redes sociales como Twitter y Facebook.
- Responder a los comentarios sociales con información que fomente el conocimiento del público sobre la estrategia de la empresa.
- Diseñar todas las comunicaciones de marketing para implementar un estilo y una voz acorde con la estrategia de la empresa.
La comunicación es el centro de todo. No puede ejecutarse una estrategia si no puede comunicarse al respecto, ya que se trata de elementos entrelazadas. Cuando la estrategia comercial de la compañía está en línea con los intereses, objetivos e inquietudes de los accionistas, compradores y otros grupos de interés, un plan de comunicación externa sólido puede convertirse en uno de los activos más valiosos del negocio para ganar nuevos clientes, satisfacer a las audiencias e incluso desarrollar asociaciones empresariales rentables.
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