El mercado laboral cambia constantemente y los profesionales deben adaptarse cuanto antes a los cambios que están por venir enfrentándose a los retos que plantean las nuevas tecnologías. Los knowmads son el perfil profesional más demandado por las empresas en 2018. Este término, acuñado por John W. Moravec, nació para responder a las demandas de las empresas. Un concepto que define a un nuevo tipo de profesional caracterizado por ser un trabajador del conocimiento que colabora libremente con diferentes empresas y para proyectos concretos pero, ¿cómo identificarlos?
Los knowmads se caracterizan por ser profesionales itinerantes, nómadas del conocimiento, hiper-conectados digitalmente, expertos en su ámbito y en competencias como la cooperación, el aprendizaje continuo y la innovación. Valorados por su conocimiento y por su adaptación al entorno social y tecnológico, son autodidactas, dueños de su formación y carrera profesional.
Por tanto, el valor que distingue a un knowmad frente a otras personas es su conocimiento, un hecho que, además, es una ventaja comparativa muy relevante.
Los departamentos de Recursos Humanos seleccionan cada vez más por competencias personales que por competencias técnicas. Entonces, ¿cuáles son las competencias y habilidades que caracterizan a un knowmad y le dan una gran ventaja competitiva sobre el resto de candidatos?
Según Sergio Edú Valsania, docente del Máster Oficial RRHH de ENyD, la proactividad, la automotivación y una gran capacidad de generar y facilitar aprendizaje son las habilidades que caracterizan a este perfil. Otra competencia importante que debe tener un knowmad es la creatividad y la capacidad de pensar de forma divergente para desarrollar ideas y proyectos innovadores. “Aunque son muy independientes, de ahí su proactividad, también tienen muy desarrollada la competencia de trabajo en equipo y liderazgo, pues muchas veces su misión también implica coordinar equipos para el desarrollo y mejora de determinados productos o solución de problemas”, matiza el docente.
Además de tales competencias personales y sociales, también es casi imprescindible un buen nivel de inglés y otros idiomas, pues un Knowmad es un profesional que trabaja en diversos contextos culturales. En definitiva, según Edú Valsania, los knowmads son profesionales que, además, “han conseguido desarrollar una marca personal gracias a su compromiso y calidad de los trabajos, pero también por tener una visión estratégica de su carrera profesional”.
Marta Carballal, consultora freelance de RRHH, define a los knowmads como profesionales cualificados y libres, nómadas, ágiles, reactivos, flexibles, móviles y valientes. Según Carballal, este perfil “no tiene un único empleador ni una única carrera profesional y están en permanente desarrollo.
Además, “conviven bien con la incertidumbre pudiendo adaptarse al contexto con facilidad y ofrecer la respuesta más adecuada”. La planificación cerrada y la necesidad de previsión no pertenecen a este género. Su flexibilidad les permite adaptarse a proyectos y circunstancias. “Tienen pensamiento crítico, creatividad, innovación, optimismo y una gran orientación al cambio, siendo un perfil que se adapta muy bien a la necesidad de las organizaciones actuales.
Según Sergio Luque, docente del Máster Oficial en Dirección y Gestión en Marketing Digital y Social Media de la Escuela de Negocios y Dirección – ENyD, los knowmads “son personas inquietas, interesadas en la búsqueda de nuevos conocimientos, inteligentes y muy perseverantes. El término en inglés hace referencia a nómadas del conocimiento, así es que es lógico pensar que los knowmads compartan estas características entre sí.
Desde su punto de vista, los knowmads no esperan a tener las soluciones delante, sino que “buscan anticiparse a los posibles problemas que podrán darse en un contexto determinado ofreciendo soluciones, alternativas y respuestas reales que previamente han sido elaboradas después de un proceso de búsqueda de información”.
En estos momentos, todo aquel que viva en esta era está llamado a desarrollar una serie de destrezas y habilidades para desenvolverse en un mundo hiperconectado e hiperdigitalizado. Por este motivo es tan necesaria la formación continua. Según Antonio Tena, docente también de ENyD, “la formación debe acompañarnos en nuestro día a día ya que el entorno en el que estamos lo exige”.
“Se trata de un entorno cambiante y muy dinámico en el que, para estar al día, la inquietud de la formación debe estar interiorizada. En definitiva, la inquietud por aprender debería ser un hábito adquirido que realizamos a diario sin pensarlo”, explica Tena.
Zahaira Fabiola González, docente también de Marketing Digital en ENyD, opina que si no se realiza una actualización constante de conocimientos, “se corre el riesgo de ser rebasado por los propios acontecimientos”.
En el sector del Marketing Digital ocurre precisamente esto. Esta docente imparte varias asignaturas relacionadas con las tendencias actuales del marketing, innovación y estrategias de comunicación digital y cada curso que prepara debe revisarlo y actualizarlo constantemente, ya que si no lo hace, muy probablemente transmite a sus alumnos “conocimientos obsoletos” y peor aún, los alumnos pueden “llegar a cuestionar” lo que les enseña, en el sentido de que “no corresponde con lo que ellos mismos están viviendo a través de sus redes sociales o internet, debido precisamente a esa hiperdigitalización”.
En este sentido Sergio Luque opina del mismo modo. “Vivimos en un mundo ultra competitivo y en constante evolución en el que instalarse en la denominada zona de confort es hoy más peligroso que nunca”. Por este motivo, cree que “todos los profesionales deben mantener un firme compromiso consigo mismos, no solo en ser mejores cada día en el trabajo que realizan, sino también en adquirir nuevas competencias, conocimientos y habilidades que resulten imprescindibles para lograr ventajas competitivas o sinergias a medio y largo plazo”.
Por lo tanto, más que un perfil, knowmad es una actitud, “una inquietud por aprender e investigar, una sensación constante de ignorancia, humildad para reconocer que no sabemos nada y que hay que seguir aprendiendo y estudiando. Una actitud de cambio constante y de no aferrarse a lo establecido”. Así define este término Antonio Tena.
En esta línea, según Randstad, un knowmad debería tener los siguientes requisitos:
- Entienden el trabajo como un oficio: Se dedican a trabajos que les gusta desempeñar y lo hacen no como un medio para ganar dinero, sino para alcanzar su propia satisfacción personal.
- Generan ideas y son imaginativos: Son una fuente inagotable de recursos e ideas. Además, están capacitados para reaccionar ante cualquier tipo de problemas o imprevistos y ofrecer soluciones.
- Sentimiento de pertenencia: No se sienten identificados con la idea de pertenecer únicamente a una marca o compañía. Desempeñan su trabajo de forma autónoma y no toleran bien recibir órdenes.
- Dominan las nuevas tecnologías: Forman parte de los llamados early adopters, es decir, innovadores que están a la vanguardia en la adquisición de los últimos productos tecnológicos y están al tanto de las novedades de los que están por venir.
- Gestión de redes sociales: Una herramienta que utilizan para la difusión del conocimiento y para estar informados sobre todo lo que ocurre en el mundo.
- Gran capacidad de adaptación: Son personas muy versátiles, competentes, flexibles, adaptables y moldeables; lo que les convierte en candidatos ideales para todo tipo de ecosistemas laborales.
- Aprendizaje continuo: No se conforman con lo que ya saben. Son conscientes de que, para permanecer actualizados, deben formarse durante toda la vida. Aprenden en función de sus inquietudes.
- Sin miedo al fracaso: Asumen sus errores y aprenden de ellos. Les gusta ser responsables de sí mismos y no dejan que su futuro dependa de otros.
Según Zahaira Fabiola González, “el knowmad ha existido siempre y lo seguirá haciendo”. La diferencia es que ahora se le ha puesto nombre y que las nuevas tecnologías “han facilitado su mayor y rápido desarrollo”. Por lo que, sin ninguna duda, los knowmads ya se están haciendo un hueco en nuestra sociedad.