La manera en la que nos comunicamos ha cambiado y lo sigue haciendo constantemente.
Internet, el crecimiento del comercio electrónico y las redes sociales han marcado las tendencias en el Marketing digital; haciendo que ahora las necesidades del consumidor sean entendidas y atendidas con mayor facilidad y velocidad.
El marketing digital tiene como principal objetivo el de promover los productos/servicios, basándose en la interacción con clientes potenciales, en la fidelidad de los ya clientes habituales y la investigación de mercados. Es decir, es el uso de Internet y de las redes sociales con el objetivo de mejorar la comercialización de un producto o servicio.
La cercanía con el cliente, la libertad de decisión que se le dá al permitirle opinar sobre productos y servicios, y el poder compartir contenido; han cambiado de manera sustancial la forma en la que una empresa se comunica con el mundo.
El Marketing Digital es crucial para empresas que están empezando; pero no todas cuentan con la capacidad de contratar a expertos en áreas tan importantes como SEO, publicidad online, e-commerce, entre otros. Del SEO ya hemos hablado con anterioridad, y ahora vamos a enfocarnos en las redes sociales: son fundamentales.
Una PyME puede explotar la segmentación digital local, dirigiéndose tanto a un destino local y/o ampliar su alcance a escala global. Es por ello que resulta muy importante la comprensión de la importancia que posee.
Cualquier empresa puede llegar a miles de personas a través de los medios digitales. Un sitio web bien optimizado, más las redes pueden llegar a traducirse en potenciales ventas. Igualmente la presencia profesional en las principales redes sociales (Facebook, Instagram, Twitter, LinkedIn, YouTube, Google+, Snapchat, etc.) tiene que tener como objetivo principal la creación de una comunidad de usuarios con un enlace emocional con la marca; apuntando a convertir a los extraños en amigos, a los amigos en clientes y a los clientes en “evangelizadores” de la marca.
El marketing digital tiene ventajas trascendentales como la personalización. Permite adecuar el tratamiento a cada cliente en particular, a muy bajo costo.
Es importante resaltar que los consumidores actuales exigen un trato completamente personalizado por parte de las empresas. Por ejemplo: Pueden saber dónde vive un cliente, que tipo de cine mira, que tipo de gaseosa prefiere, etc.; y con toda esta información, pueden acercarte a él de manera más efectiva en las redes sociales.
Otro punto a favor es el posicionamiento. Una página web bien estructurada le ayuda a una empresa a hacer una correcta promoción de sus productos y servicios; y la posiciona a nivel global. Es ideal que la página tenga un diseño interactivo, que sea fácil de usar y que pueda abrirse desde un celular.
La visibilidad de la marca es muy importante. Si tu empresa no está en Internet “no existe”, ya que la mayoría de las personas buscan en Internet antes de comprar un producto o servicio en el mundo físico y/o digital.
Cuando se realiza una estrategia de marketing digital puede ser medida mucho más fácilmente que las estrategias de marketing tradicional y eso representa un gran punto a favor.
Como una de las más conocidas ventajas, podemos enunciar el bajo costo. Las estrategias de marketing digital son de costo más bajo que la mayoría de las estrategias del marketing tradicional, lo que las vuelve muy accesibles a para las Pymes.
Con todo lo dicho, no hay más excusas para desarrollar una estrategia de Marketing digital, que resulta muy necesaria.
Autor: Mgt. Alejandra Kindzersky
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