El poder transformador del emprendimiento

0

Se debe asegurar a las pymes el acceso a recursos, formación y capital

Emprender significa mucho más que poner en marcha un negocio. Los emprendedores hoy son las personas que tratan de resolver problemas sociales o medioambientales, crear empleo, incrementar las oportunidades y genera prosperidad. Definitivamente son quienes impulsan el crecimiento económico global.

Y el emprendimiento es algo que se puede aprender, y que se puede enseñar. Babson College fue la primera institución educativa para los negocios en introducir el emprendimiento como disciplina académica. Creo que aunque pueda haber personas con una inclinación o predisposición natural a innovar y a resolver problemas creando nuevas empresas, son muchos más quienes tienen la capacidad para aprender a pensar y a actuar de forma emprendedora en cualquier entorno, sea en una start up, en una gran corporación, en empresas familiares, en pymes, en organizaciones sin ánimo de lucro, en la Administración.

Las empresas familiares, por ejemplo, son muy importantes en este sentido para desarrollar en las nuevas generaciones la actitud y la aptitud emprendedora. Recientemente celebramos en Madrid la reunión internacional que cada año reúne a la comunidad Babson en un centro de negocios de primer orden, como es el caso de Madrid. Allí anunciamos la creación del Instituto para el Emprendimiento Familiar, un centro para la enseñanza, la investigación y el desarrollo de programas innovadores dedicados a impulsar iniciativas emprendedoras familiares en todo el mundo.

La empresa familiar

La mitad de los estudiantes de nuestro centro proceden de empresas familiares que acuden a nosotros para que les preparemos para crear valor económico y social, de forma que al hacerlo puedan contribuir a transformar, para mejor, vidas, negocios y comunidades.

Las empresas familiares crean entre el 70% y el 90% de PIB global. En España, se estima que el 75% del sector empresarial privado son empresas familiares, que son responsables a su vez del 65% del empleo del país. Y hay estudios que muestran que los negocios familiares tienden a ser más responsables desde el punto de vista social y a prestar más atención a la triple cuenta de resultados: personas, planeta y beneficios.

La supervivencia generacional de las empresas familiares es crítica para la creación de empleo, la prosperidad de la economía y el impacto social de los negocios. Cada generación de un negocio familiar precisa de un líder con actitud y aptitud emprendedora.

En España tuve la oportunidad de dar la bienvenida a la Academia de Emprendedores a Juan Roig, presidente de Mercadona. La Academia es un salón de la fama del emprendimiento, Babson la fundó en 1978 y en las últimas cuatro décadas ha incorporado a más de cien de los más reconocidos líderes empresariales del mundo. Menciono el caso de los Roig porque ejemplifica lo que es el emprendimiento familiar. Juan Roig, se hizo cargo en 1981 de un negocio familiar, lo desarrolló y lo hizo crecer hasta convertirlo en la cadena de supermercados líder del país ,con más de 1.600 establecimientos y 84.000 trabajadores. Bajo su liderazgo, Mercadona ha llegado a ser un modelo de creación de valor poniendo el foco por igual en los clientes, los empleados, los proveedores, la sociedad y el negocio. Y como a menudo ocurre con las familias emprendedoras, el efecto de su esfuerzo colectivo se extiende más allá de su negocio principal. Así, Juan Roig es el impulsor de Marina de Empresas, un centro para el emprendimiento a todos los niveles: educación y formación, incubadora y aceleradora de proyectos; inversión y crecimiento.

Emprender en España

Las perspectivas para el emprendimiento en España son cada vez más positivas. Iniciativas como la mencionada son importantes para el ecosistema emprendedor del país y la mejor vía para aprovechar el potencial y el apetito por la innovación.

Babson es miembro fundador del Monitor de Emprendimiento Global (GEM), el programa más grande y más desarrollado de investigación sobre emprendimiento en el mundo. Los datos de este monitor nos confirman que más de la mitad de los adultos españoles ven en el emprendimiento una buena opción de carrera y que un 60% no se desanima por el miedo al posible fracaso. Muchos y muchas expresan confianza en sus habilidades como emprendedor y un creciente número de personas cree que existen oportunidades en su entorno para iniciar un nuevo negocio. Destaca además el alto índice de mujeres emprendedoras en España, más algo que la media europea- un factor que sabemos que es muy importante para el crecimiento económico.

Sea desde el ámbito de la educación, desde la política o desde los negocios, todos podemos ayudar a que este momento coja impulso adoptando para ello una mentalidad emprendedora y animando a otros a pensar y a actuar de forma emprendedora en cualquier circunstancia o en cualquier posición que ocupe. Es posible establecer una cultura de la innovación, colaboración y experimentación. Donde el error no nos defina, y donde asumir riesgos sea algo a lo que se anima. Es posible equipar a los estudiantes con habilidades básicas para los negocios y el emprendimiento, empezando en la educación secundaria. Es posible, y necesario, asegurar que las pequeñas y medianas empresas tienen acceso a recursos, formación y capital. Es posible crear un entorno regulatorio que apoye el nacimiento de nuevos negocios, el crecimiento de pequeños negocios y la creación de empleo. Y es posible trabajar juntos para promover un ecosistema emprendedor que tenga impacto social, además de económico.

El emprendimiento es la fuerza más poderosa para la creación de cambios positivos en el mundo. Apoyar el emprendimiento es apoyar a familias, negocios y comunidades para hacer realidad el crecimiento económico en España y en el todo el mundo.

Ver más en: El Economista

Leave A Reply